Tips para iniciar small talks o conversaciones pequeñas en entornos inesperados
Nacional.- “Hola, buenas tardes. ¿A qué piso vas?”, preguntas. “Al cuarto”, responde tu colega. “Ah, mira, yo también”, replicas. “Sí, qué casualidad”, contesta. “Claro, sí”.
Fin de la conversación. ¿Te ha pasado?
Para miles de personas hacer conversación con una persona que no conocemos o en un entorno inesperado (en inglés: small talk) puede convertirse pronto en una situación incómoda, estresante y, probablemente desastrosa.
Por lo tanto, dominar la psicología para conseguir sustituir intercambios incómodos por conversaciones fructíferas puede marcar la diferencia entre una negociación fluida y una árida. Y cualquiera puede aprender a hacerlo.
Aquí encuentras algunos tips de lo que SÍ y NO decir en una small talk:
NO: EL REPORTE DEL TIEMPO
Son comentarios vacíos e indeterminados diseñados únicamente para llenar el espacio y reducir la incomodidad. Por supuesto, no siempre tenemos un tema en común o conocimiento previo de la persona que tenemos enfrente, pero el resultado es siempre el mismo: silencios incómodos.
NO: TEMAS INCENDIARIOS
Evita temas que puedan ser controversiales o de mal gusto: política, religión, sexo. No solamente pueden resultar ofensivas, en caso de que la persona no esté de acuerdo, sino que esto puede resultar en una enemistad innecesaria o una conversación muy desagradable. Recuerda que no todos piensan como tú, ni tendrían por qué hacerlo.
NO: COMENTARIOS INVASIVOS
¿Comentarios sobre el peso o la edad? ¡Ni de broma! Guarda estos para las personas con las que tengas mucha confianza previa.
NO: TRATAR DE ESCAPAR
Es sencillo tratar de evitar la conversación a toda costa, pero ¿de qué estás huyendo, en realidad? En la vida y en los negocios, las conversaciones son los vehículos en donde se crean las relaciones. Y las relaciones abren cualquier cantidad de puertas a lugares inesperados; no solo de negocios, sino profesionales y personales.
SÍ: PON ATENCIÓN
Observa elementos visibles que se vinculen con tu interlocutor(a), como libros, diplomas, series, adornos, fotos y haz preguntas relacionadas a ello para conectar. Por ejemplo, “esa obra que tienes como fondo de pantalla es espectacular ¿es de algún artista conocido?”
De esa manera, permites que la persona tome las riendas y hable de sí misma. Entre tanto, tú mantén una atención con escucha activa, y continúa la conversación.
SÍ: HAZ MUCHAS PREGUNTAS
La clave de la conversación es esta: haz muchas preguntas. A las personas les gusta mucho hablar de sí mismos, de las cosas que les gustan y les interesan. Haz preguntas amables, positivas y abierta. Por ejemplo: ¿Cuál es tu mayor reto para esta semana?
A todas las personas agradecen tener alguien que les escuche. Así que, una vez que hagas la pregunta:
- Escucha atentamente
- No interrumpas
- No “ganes” con una historia mejor
- No la dejes a la mitad
- No te distraigas con tu teléfono
Tratándose de primeras conversaciones o pequeños encuentros, deja que la otra persona se lleve toda la atención y el interés. Las harás sentirse bien consigo mismas, y como resultado, buscarán tu compañía y consejo más a menudo.
Aunque parezca contradictorio, recuerda que el mejor conversador es el que menos habla. ¡Ponlo en práctica hoy mismo!
Fuentes: Entrepreneur, El País