Recomendaciones para lograr un ascenso y brillar en el nuevo puesto
Nacional.- El ascenso es una puerta a nuevos horizontes profesionales. También es una gran fuente de motivación, pues valida tus habilidades y destaca tu potencial, aunque ello suponga nuevos desafíos.
Por ello, estar a la altura de tu nuevo puesto no solo requiere un cierto nivel de madurez y habilidades, sino también unos nervios de acero.
¿Deseas lograr un ascenso?
De ser así, es importante que se lo comuniques a tus superiores, por ejemplo, durante la evaluación de desempeño. No te quedes de brazos cruzados esperando que tus responsables noten tus cualidades y te ofrezcan espontáneamente un ascenso.
Por otra parte, debes prepararte para explicar las razones por las que deseas esta evolución profesional y tener en cuenta que tus argumentos deben ajustarse a tus proyectos profesionales y personales. Por ejemplo, no sería lógico solicitar un puesto en el que debas viajar con frecuencia si deseas dedicarle más tiempo a tu vida personal.
Considera que un ascenso también puede llegar incluso si no lo has pedido. Si tus superiores consideran que eres la persona ideal para un puesto más alto y las responsabilidades que conlleva, puedes sentirte muy orgulloso(a). Eso sí, piénsatelo un ratito, sin importar cuán atractiva sea la oferta.
¿Te han ofrecido un ascenso, pero no te sientes listo(a) para ejercer el puesto?
Siempre y cuando expliques tus argumentos con claridad, puedes rechazar el ascenso sin que ello signifique que tus superiores te descarten en el futuro. Una respuesta sincera, madura y objetiva respecto a tus habilidades no tiene por qué cerrarte la puerta, sino que te puede convertir en un(a) candidato(a) aún más legítimo para el puesto cuando llegue el momento indicado.
¿Quieres ascender, pero tus responsables creen que es “demasiado pronto”?
Imagina que has iniciado el proceso para lograr un ascenso y tus superiores cambian de opinión porque creen que es “demasiado pronto”. Una vez superada la decepción, puedes tomarte un tiempo para reflexionar sobre la situación. Este pequeño obstáculo no es necesariamente un fracaso, sino una forma de evitar lanzarte a un puesto que tal vez se te quede demasiado grande y no te permita estar a la altura.
Has conseguido el ascenso, ¿y ahora qué?
- No cambies radicalmente de actitud ni menosprecies a tus antiguos colegas.
- Reúnete con tu equipo y recuérdales que conoces las tareas, los obstáculos y los desafíos.
- Con el fin de tranquilizar a tus colegas, comparte tu visión de tu nuevo puesto y lo que tienes previsto para los próximos meses.
- De ahora en adelante, evita los chismes y las críticas hacia otras personas, que no conducen a nada ético.
Pide ayuda para seguir mejorando
Hablar de tus dificultades no es sinónimo de debilidad. Todo lo contrario, es necesario comunicarse para poder asumir responsabilidad y progresar. Atreverte a solicitar algunos cambios podría permitirte soportar la presión e incluso evitar que abandones tu puesto, en el peor de los casos.
Por último, aunque la sociedad considere la evolución jerárquica como el ascenso ideal, recuerda que también se puede evolucionar de forma transversal en la empresa, una posibilidad que puede ser igual o incluso más satisfactoria y enriquecedora.
Fuente: Welcome to the Jungle