Qué son las competencias emocionales y cómo influyen en el ámbito laboral 

Publicado el 18 May 2022, En #comunicaciones

Nacional.- El modo en el que experimentamos nuestras emociones determina buena parte de nuestra calidad de vida, de nuestros hábitos, y en nuestra manera de ver la realidad. 

 

Hoy sabemos que existen ciertas competencias emocionales que pueden ser desarrolladas a través de la experiencia y el aprendizaje.

 

Las competencias emocionales, según el modelo del autor Daniel Goleman, son el conjunto de habilidades, conocimientos y actitudes que tiene una persona para poder entender sus propias emociones, regularlas y gestionarlas. Juntas configuran la Inteligencia Emocional de una persona y permiten afrontar la vida diaria de forma óptima. 

 

Por su parte, en el contexto laboral y profesional, es habitual que estas habilidades sean consideradas como “habilidades blandas”, debido a la importancia que revisten en la interacción con las personas.  

 

¿Cuáles son las competencias emocionales? Según el psicólogo Daniel Goleman, se describen las siguientes: 

 

1. Autoconciencia

Es la capacidad de autoconocimiento en lo relativo a las emociones. De esta manera, conociendo nuestros puntos fuertes y débiles, adquiriremos mayor seguridad en nosotros mismos, más confianza y autoestima. 

 

2. Autorregulación

Consiste en nuestra capacidad de modular nuestras emociones, es decir, elegir las emociones queremos experimentar en determinado momento, y, de esa manera poder evitar que las acciones ajenas nos afecten. El objetivo no es contener las emociones, sino transformar esa energía negativa en positiva.   

 

3. Empatía

Es la capacidad de “conectar” emocionalmente con alguien y poder ajustar nuestros comportamientos a su estado emocional, de modo que aumenten las posibilidades de establecer alianzas entre ambas partes o de dar apoyo en momentos clave, sin depender de las indicaciones verbales explícitas. 

 

4. Automotivación

Mediante esta habilidad es posible convertir nuestras emociones en combustible motivacional, de modo que nos orienten más hacia la realización de tareas que nos acercan a los objetivos que nos hemos planteado. La automotivación requiere de positivismo, confianza, no ceder ante los obstáculos, sino que enfrentarlos con optimismo y persistencia 

 

5. Habilidades sociales

Esta última competencia emocional se basa tanto en el conocimiento y dominio de las normas de socialización que imperan en los círculos sociales en los que nos movemos, como en la capacidad de generar expectativas y significados a través de nuestro manejo de las emociones y su aplicación a nuestra manera de comunicar (de manera verbal y no verbal). 

 

 

Las competencias emocionales, por lo tanto, constituyen un ingrediente clave en el desarrollo personal y profesional, sobre todo cuando se trata de cargos de liderazgo, ya que pueden determinar su efectividad en el puesto de trabajo. 

 

¿Cómo se reflejan las competencias emocionales en el ámbito laboral? Aquí tienes un ejemplo:  

 

Notas que un miembro de tu equipo ha bajado su rendimiento y últimamente ha estado irascible con sus colegas y otras áreas de trabajo. Te reúnes con esa persona para conversar sobre el tema y te confirma que recientemente ha perdido a un familiar cercano y está atravesando una situación muy difícil. 

 

Mientras la persona te cuenta cómo se siente, tú escuchas con plena atención y muestras disposición para barajar diferentes opciones con el fin de ayudarla y afrontar la situación de la mejor manera posible para ambos partes. En este caso, estás desarrollando la empatía, ya que entiendes lo que le ocurre a esta persona y estás valorando soluciones para ayudarle durante esta etapa.