Habilidades efectivas de delegación: cómo delegar con éxito como líder

Publicado el 11 Nov 2021, En #comunicaciones

Nacional.- “¡Si quieres que algo salga bien, hazlo tú mismo!”. Muchas veces los líderes han repetido en incontables ocasiones esta frase cuando anhelan cumplir los objetivos de manera perfecta. Probablemente, detrás de esa frase había alguien que:

 

  • No delegó la tarea correcta; o
  • No entendía en quién delegaba esa persona la tarea; o
  • No quedó clara la importancia del qué / por qué / cuándo se delegó ese algo;
  • Todas las declaraciones anteriores.

 

Si quieres crecer como persona, como profesional, como líder, probablemente se van a agregar o perseguir más y/o nuevas tareas u objetivos. Y para eso, tienes que SOLTAR. 

 

No. Puedes. Hacer. Todo. Todo. El. Tiempo. Siempre.

 

Ventajas de delegar

  • Podrás centrarte en las cosas correctas;
  • Podrás enfocarte en hacer las cosas bien;
  • Tendrás la posibilidad de alentar a otros a crecer y asumir más responsabilidades;
  • Adquieres más responsabilidad y te animas a crecer
  • Te convertirás en mentor o guía de otras personas.

 

Ninguna persona hace las cosas bien la primera vez: lo intenta, lo intenta, falla, una y otra vez. Y aprende hasta que lo logra. No saben todo y eso debes tenerlo claro cuando delegues.

 

Cómo delegar con éxito como líder

 

 

1. Comprende QUÉ estás delegando y QUÉ se puede delegar. 

No todas las tareas o cosas se pueden delegar, deberás revisar tus actividades e identificar cuáles se pueden delegar en el plazo de clasificación y probablemente cuáles requerirán más tiempo y/o preparación para delegarse

 

2. Identifica QUIÉN puede asumir esa responsabilidad, o QUIÉN ya te hizo saber que está interesado/a en asumir más tareas. 

Ten en cuenta la preparación, las habilidades y el tiempo que los demás necesitarán para poder realizar esas tareas con éxito. Probablemente algunos miembros de tu equipo estén más que preparados, pero otros necesitarán un poco de tutoría o formación hasta que puedan hacerlo por sí mismos

 

3. No tengas miedo de establecer algunas “reglas” o pautas

Estas evitarán la reelaboración del objetivo y facilitará la comprensión de las expectativas por cumplir.

 

4. Sé transparente sobre QUÉ se debe hacer y CUÁNDO debe entregarse, y permite a la persona en quien delegas que administre CÓMO hacer lo que pides.

También te sirve para alinear a tu equipo acerca de por qué es importante lograr esa tarea. 

 

5. Mantente atento/a para abordar cualquier duda, apoyo o comunicación que otros puedan necesitar. 

La retroalimentación sobre el proceso es clave, por lo que otros pueden aplicarlo y mejorar también si están fallando (a veces no es un fracaso, simplemente lo hacen a su manera.

 

6. Agradece a quien toma esa tarea.

No siempre es fácil y no todos levantan la mano para tomar más responsabilidad o compartir que están dispuestos a crecer. Así que, si confías en los demás para hacer esas tareas, agradéceles cuando la terminen, muéstrales y brinda retroalimentación sobre lo que se puede mejorar para la próxima vez.

 

Fuente: Management 3.0