Cómo convertir el aburrimiento en un aliado para la creatividad —en el trabajo y en la vida

Publicado el 25 Ago 2023, En #comunicaciones

Nacional.- Tenemos la creencia de que una mente ocupada es una mente activa. Al contrario, damos por sentado que una cabeza ociosa es floja y no productiva. Entonces, nuestra reacción es llenar ese hueco de actividades y tareas. Además, afirmamos con gran autoridad que mientras más rápido lo hagamos será mejor. Eso es un error que nos puede llevar a inhibir la creatividad.

 

Más que condenar, lo que sirve es analizar. La pregunta correcta aquí es: ¿Qué sucede cuando la gente se aburre?

 

Cuando estamos concentrados en la resolución de un problema, se nos enciende la parte prefrontal del córtex cerebral, que está atrás de la frente y es donde alojamos las fórmulas ya conocidas por nuestra mente. Y por más que nos esforcemos para encontrar la solución a un problema, recordar el nombre de una persona o de un correo importante que escribiste, suele suceder que no la hallamos, no recordamos… como si con tan solo intentarlo, se difuminaran los recuerdos. 

 

 

En cambio, cuando nos relajamos, nuestra atención le permite a la mente divagar y da oportunidad al cerebro de recuperar recuerdos que tenemos almacenados o de ver las cosas desde un punto de vista alterno. Al aburrirnos, le damos permiso al cerebro de iluminar partes que al estar concentrados no se encienden. Dicho de otra manera, el aburrimiento puede estimular la creatividad y la resolución de problemas, nos enseña a identificar las actividades que nos gustan, que tienen mayor significado y nos activa la resiliencia.

 

El aburrimiento como una alerta por atender

 

El aburrimiento es una emoción que sirve como luz indicadora de que lo que estamos haciendo en ese momento no funciona. Es decir, se trata de una alerta que, en vez de desestimarla, debiéramos atender. ¿Qué nos dice esa alerta? Nos indica que lo que estamos haciendo es demasiado: demasiado fácil o difícil; es abrumador o irrelevante; es interesante o molesto.

 

 

Una forma en que los líderes pueden ayudar a sus equipos de trabajo o en la que nosotros mismos podemos abordar el tema, es aprender a gestionar nuestro aburrimiento. ¿Cómo? En el trabajo se suele expresar aburrimiento cuando nos sentimos solos/as y necesitamos atención, así que, a un buen líder le corresponde preguntarles qué hace falta para convertir ese sentimiento en un reto.

 

De hecho, sería muy bueno programar un tiempo libre en el esquema de trabajo, un espacio dedicado a relajar la mente, a elevar la mira de la cotidianidad y a permitir que la creatividad aflore.

 

No se trata de dejar a las personas en un cuarto vacío sin absolutamente nada que hacer, se trata de permitir que el equipo de trabajo se allegue de elementos que serán significativos para cada uno y que encajarán bien con los proyectos que tienen asignados.

 

Existe un ejercicio que resulta muy atractivo para muchas personas: salir a caminar y pensar en tres ideas —mejoras, propuestas— que puedas implementar. Este es el gatillo que destapa la creatividad, es el punto de inflexión en el que el aburrimiento se convierte en una emoción de acción positiva.

 

 

El problema que enfrentamos es que, para desaburrirnos, los seres humanos de estas épocas nos volcamos a las pantallas de nuestros dispositivos. Así, en vez de que la creatividad aflore, la inhibimos. Curiosamente, el sendero creativo busca rutas diferentes y el aburrimiento puede formar parte de tu trabajo para crear e impulsar mejores cosas.

 

Fuente: Forbes México