5 estrategias para recuperar la calma y la confianza en momentos de estrés laboral
Nacional.- El estrés laboral puede dañar su salud y su productividad. Pero es posible aprender a respirar, moverse y replantear los pensamientos. Aunque es difícil prevenir los nervios por completo, puedes aprender a intervenir y autorregularte en situaciones laborales estresantes.
Y aquí tienes algunas maneras de recuperar su confianza y presencia de ánimo tan rápido como se pierden:
1. Ten un momento de conciencia
Cuando sientas que estás cayendo en una espiral de estrés, haz una pausa y pregúntate: ¿Estoy presente? ¿Entré en un loop laboral que me mantiene estresada/o?
Puedes notar que tu corazón se acelera, tu respiración es superficial, tu garganta se siente seca y con bultos, o simplemente no puedes concentrarte. Cuanto antes reconozcas lo que está sucediendo, más rápido podrás intervenir para regular tu sistema nervioso.
2. Respira
Tu respiración es tu recurso más valioso cuando se trata de provocar cambios psicofisiológicos inmediatos y significativos, e interrumpir tu respuesta al estrés.
La respiración profunda tiene dos propósitos: 1) activar el sistema nervioso parasimpático y 2) reducir la frecuencia cardíaca. Cambiar conscientemente la atención de tu mente a tu cuerpo también activa centros en tu cerebro que te ayudarán a volver a estar presente.
Cuando te sientas en desequilibrio, respira larga y profundamente, y dirige tu atención en las sensaciones respiratorias.
3. Muévete
¿Qué sucede con la postura corporal cuando estás estresado? Puedes notar que toma una posición contraída o encorvada. Esta contracción no solo restringe tu respiración, sino que también afecta (en forma probablemente negativa) tu perspectiva y estado de ánimo.
Si estás sentado en tu escritorio o en una mesa de conferencias, muévete en tu silla, siéntate derecho, descruza las piernas, levántate o realiza cualquier movimiento que sea posible y apropiado en ese momento.
Estos dos cambios (respirar y moverse) pueden conducir a cambios psicofisiológicos inmediatos. Tendrán un impacto en cómo te sientes, piensas y te comportas, y son formas rápidas y efectivas de intervenir y neutralizar una respuesta al estrés.
4. Reconoce tu estado
Incluso después de que tu cuerpo se calme, necesitas apoyarlo con cambios en su forma de pensar. Si continúas teniendo pensamientos negativos sobre lo que está sucediendo en ese momento, es posible que desencadene otra respuesta de estrés.
En su lugar, trata de reconocer lo que estás experimentando, sin juzgar. Por ejemplo: “Francamente las condiciones no se han dado para terminar el reporte y me estoy atrasando con otros trabajos. Esto me tiene estresado/a”.
5. Ten un diálogo interno compasivo
Utiliza el poder de tu pensamiento para evocar emociones positivas. En la práctica, esto podría parecerse a tomar un respiro, reconocer que se está produciendo una situación estresante y que podrás salir de ella. Por ejemplo: “Con este informe, he podido avanzar con lo más difícil y logré rescatar una data que parecía imposible. Así que mañana lo retomaré para finalizar la última parte. Mi trabajo aquí ha terminado 🖖. Por ahora.”
Fuente: Infobae