8 formas en las que el desorden afecta a la productividad
Nacional.- Torres de vasos de café usados, escritorios dominados por la anarquía, papeles sin clasificar, cajas aquí y allá, material de oficina desperdigado… ¿Has trabajado alguna vez en un escenario dominado por el caos?
El modo en que afecta el desorden a la productividad puede hacer que tus niveles de cortisol (la hormona del estrés) rocen el techo.
Y el impacto psicológico es significativo. Todo entorno dominado por el desorden afectará a tu actitud y elevará los niveles de estrés. De modo que, desempeñar tu jornada laboral en un hábitat de estas características, tendrá un coste:
1. Distracción
El nivel de atención del cerebro es muy limitado. A veces, el más pequeño estímulo -como una notificación del móvil- interrumpe tu foco mental.
2. Pérdida de tiempo
No existen estudios al respecto, pero la cantidad de horas que se pierden en una organización por el desorden es inmensa. De hecho, pocas realidades son más frustrantes que necesitar un informe o herramienta determinada y no encontrarla.
3. Disminuye la motivación
La falta de equilibrio perceptivo te hará creer que hay muchas cosas que están fuera de tu control. Es una sensación incómoda y estresante que cala en tu interior. El ánimo se apaga, aparece el malestar y la conducta se vuelve pasiva y falta de iniciativa.
4. Estrés y ansiedad
El cerebro es un órgano muy sensible a todo lo que acontece en su entorno. En caso de que el desorden sea persistente, tus niveles cortisol aumentarán. Esto se traduce en estrés porque tendrás la sensación de que hay una cantidad interminable de trabajo por hacer.
5. Debilita tu creatividad
Es posible que algunas personas estén habituadas a trabajar en escenarios o en escritorios faltos de orden y que esto no altere su rendimiento. Pero, por lo general, un espacio caótico abruma la mente y dificulta el pensamiento innovador.
6. Dificulta establecer prioridades
El desorden hace que sea difícil identificar y priorizar las tareas importantes. Sin una organización clara, no sabrás dónde centrar tu atención y tus esfuerzos. Es un contexto aniquilante, no hay duda.
7. Procrastinación
Cuando reina la desorganización y el desánimo es máximo, es frecuente postergar tareas. Esa visión de desarmonía permanente apaga la motivación y hace que prefieras dejar para mañana ciertas actividades urgentes, porque hoy te falta el ánimo.
8. Impacta en la salud física
Cuando los niveles de adrenalina y cortisol se mantienen en niveles elevados, surgen el insomnio, las enfermedades cardiovasculares, el dolor musculoesquelético… Es una realidad silenciosa con un gran impacto.
Fuente: La Mente es Maravillosa