6 formas de controlar el estrés en el trabajo
Nacional.- El estrés en el lugar de trabajo nos toca a la mayoría de nosotros en un momento u otro. De hecho, según cifras del Ministerio de Salud, el 30% de las licencias laborales de 2017 fueron por estrés laboral.
Hay muchas razones para manejar el estrés laboral. Para empezar, el estrés tiene un alto costo físico: puede causar dolores de cabeza, malestar estomacal, irritabilidad, depresión e incluso presión arterial elevada. En su estado crónico, se transforma en el Síndrome de Burnout. ¿Cómo controlar el estrés para que no perjudique tu productividad? Aquí te contamos:
1. Conoce qué te estresa
Claro, estás estresado. ¿Pero de verdad sabes por qué? Tal vez un compañero de trabajo hablador te distrae con más frecuencia de lo que creías, o las redes sociales te consumen. Ahora que has identificado la raíz del problema, puedes trabajar para volver a tu centro.
2. Responde al estrés de manera positiva
Si respondes al estrés volviendo a casa, abriendo una bolsa de papas fritas y arrojándote al sofá donde vas a ver a Netflix hasta que te arrastres a la cama, no te estás haciendo ningún favor.
¿Cómo puedes combatir el estrés?
- Haz mucho ejercicio
- Come una dieta saludable
- Descansa lo suficiente
- Programa tiempo social y conéctate regularmente con la gente
- Realiza actividades creativas
- Medita o practica yoga todos los días (¡Funciona!)
3. No te saltes vacaciones.
Es tentador seguir adelante y ser un mártir. A todos nos gusta parecer comprometidos con nuestro trabajo. ¿Pero tu compromiso realmente está brillando si estás estresado todo el tiempo? Para. Necesitas vacaciones. Toma tu tiempo libre para rejuvenecer, ser más productivo y así reduzcas los síntomas del estrés: insomnio, fatiga, y dolores de cabeza.
4. Actúa sobre lo que puedes controlar. Acepta lo que no puedas hacer.
¿Por qué estresarse por cosas que no puedes cambiar? Mantén una atención plena para aceptar las cosas que están fuera de tu control. Esto te ayudará a cambiar tu respuesta emocional de negativa a neutral, o incluso productiva, al enseñarte a canalizar tus energías hacia aquello que puedas manejar en lugar de reaccionar intempestivamente.
5. Pide ayuda cuando la necesites.
No tengas miedo de admitir que vas de capa caída. Todo el mundo se siente abrumado de vez en cuando, y no es ninguna pena pedir ayuda cuando realmente la necesitas.
Eso sí: primero, asegúrate de haber hecho tu mejor esfuerzo antes de buscar ayuda. Segundo, sé proactivo: si vas a pedir ayuda, ten claro lo que necesitas de las otras personas, así tu grito de auxilio no queda en una simple queja.
6. Recuerda lo que te gusta de tu trabajo.
Cuando estás estresado, es útil respirar profundo y recordar lo que amas de tu trabajo; incluso cuando los factores de estrés están abrumando. Ahora, si ya no hay nada que amar, tal vez sea hora de pensar en seguir adelante, buscar nuevos rumbos, respirar otros aires y ser feliz… antes de que el estrés te cause un grave daño físico o emocional.
Fuente: Glassdoor
